El que no ingresa a la Universidad pierde mucho, actualmente nuestro país garantiza una educación gratuita y de calidad, solo es querer y poder aprovechar las oportunidades que están al alcance.
Estudiar Antropología Social fue una experiencia enriquecedora porque a medida que avanzaba en mi proceso formativo me motivaba por ampliar conocimientos siendo autodidacta e investigando sobre cada temática abordada, comenta José Antonio Palacios García, quien recientemente realizó su defensa monográfica para optar al título de licenciado.
El joven, originario del barrio Georgino Andrade, agradece el respaldo de su madre y abuelo materno, quienes, junto con sus docentes, lo impulsaron a seguir y a cumplir su meta profesional y personal. «Mi abuelo fue el mayor soporte desde el proceso de inscripción, confiaba en mí y en mis capacidades, por eso me apoyó con los gastos que surgieron durante los cinco años».
Palacios enfatiza en la necesidad de estudiar carreras pertinentes para el desarrollo, en su caso particular, considera que la Antropología Social es una carrera muy especializada en diversos campos, lo que genera mayores oportunidades laborales. «La antropología es una disciplina muy importante porque estudia al ser humanos y todo aquello que lo relaciona a su entorno: su actuar, cultura, mundo cotidiano y su realidad».
Asimismo, sostuvo que como profesionales son partícipes del desarrollo mediante su inserción en diversos estudios, en la formulación de proyectos de investigación, iniciativas comunitarias, políticas públicas y todas esas acciones que aportan al buen vivir mostrando las realidades que viven y presentando propuestas de mejora continua.
Como experiencia personal destaca la importancia de convivir con los adultos mayores, en su caso, dedica mucha parte de su tiempo al cuido y apoyo de sus abuelos maternos, quienes por sus edades tienen complicaciones de salud, destacando lo bonito de cada vivencia compartida y el enriquecimiento adquirido por medio de las historias, saberes y experiencias que rememoran y transmiten de forma oral de generación en generación.
Referente a la educación superior, valora a la UNAN-Managua como una institución prestigiosa que cuenta con docentes de alto nivel que contribuyen a la formación de calidad en cada profesional que egresa de esta casa de estudios con competencias técnico-científicas y humanas dispuestos a ser agentes de cambio social. «Nuestros docentes desarrollan las mejores metodologías de enseñanza, se adecúan a nuestro contexto y responden a nuestras necesidades», recalcó José.
El ahora antropólogo social instó a las nuevas generaciones a luchar por sus metas, aprovechando cada una de las oportunidades que facilita la institución y el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, que está abriendo cada vez mayores espacios de formación para las personas del campo y la ciudad. «El que no ingresa a la Universidad pierde mucho, actualmente nuestro país garantiza una educación gratuita y de calidad, solo es querer y poder aprovechar las oportunidades que están al alcance», sostuvo Palacios.
