En todo tiempo se debe cuidar la salud mental

En este contexto de coronavirus es común encontrar a las personas temerosas, esta es una emoción natural ante un peligro inminente y real, pero si este sentimiento se vuelve recurrente y se acompaña de otros síntomas puede ser peligroso para la salud mental. En este caso se deben promover acciones que eviten llevarlo a un caso de estrés o ansiedad en un nivel más avanzado, que se manifiesta por la inquietud, la intensa excitación y extrema inseguridad, sostiene la psicóloga Mey Ling Pérez, de la Dirección de Orientación Vocacional y Psicológica, de la UNAN-Managua.

La maestra Pérez menciona que luego del estrés sigue la ansiedad, la que describe como un trastorno generado por una preocupación excesiva que provoca malestares clínicamente significativos. De igual manera, presenta otros síntomas característicos, entre ellos, insomnio en la primera parte de la noche, hiperactividad durante el día, sensación de desasosiego, intranquilidad de manera constante porque el sistema nervioso se encuentra activado todo el tiempo, lo que provoca una necesidad de urgencias, de querer hacer algo, pero no saber qué.

En este caso, si el paciente experimenta algunos de estos síntomas, la especialista sugiere las siguientes recomendaciones: alimentación sana y actividad física mediante ejercicios de rutina, zumba, danza, yoga y todo lo que contribuye a oxigenar los músculos del cuerpo y del cerebro. Es necesario entrenar la mente para pensar en positivo de manera consciente porque inconscientemente se hace lo contrario y cuando se cae en la ansiedad se tienen pensamientos extremistas o catastróficos.

Dentro de la familia se deben practicar las buenas relaciones cordiales y la comunicación afectiva en la que se demuestre el interés de unos por los otros, ya que esto ayuda en situaciones adversas para que los miembros del hogar se sientan protegidos, amados y en un ambiente de calidad. Asimismo, se deben practicar actividades lúdicas, tales como los juegos de mesa que ayudan a mejorar la agilidad mental y el intelecto, ver programas familiares u otras acciones que mitigan el estrés y por ende los síntomas de ansiedad.

Otro aspecto importante que aporta a la estabilidad de la salud mental es la divulgación de información veraz y objetiva, independientemente del formato que se utilice, para que las personas no alimenten su mente de noticias negativas, sino que le generen paz. Asimismo, sí se desea conocer sobre el avance de la pandemia es recomendable dirigirse a fuentes confiables como OMS/OPS, MINSA y SSDT Atlanta, entre otras.

La Universidad también es un espacio donde es vital el rol de los docentes en pro de la prevención. Es decir, es imprescindible que los académicos informen a sus estudiantes objetivamente de la situación actual de la covid-19 y hacer hincapié en las medidas de higiene preventivas, así como del uso de las mascarillas. En las aulas de clase es necesario instar a lo positivo promoviendo el autocuido, a fin de evitar el contagio, ya que «es característico, que los adolescentes y jóvenes principalmente, no sientan temor, que sean más incrédulos y confiados», refirió la maestra Pérez, quien también sugiere evitar la sobreinformación sobre los índices de enfermos y de muertes porque esto perjudica la salud física y mental.

«Hay que ocuparse y no preocuparse en tiempos de covid-19» destaca la psicóloga, por eso es necesario ocuparse en aquello que genera protección y seguridad de que estarán sanos y con menos riesgo de contraer el virus o cualquier otra enfermedad.

Contrario a los jóvenes, los adultos de edad más avanzada, no solo son más cuidadosos, sino que muchas veces caen en la sobreinformación y esto también es contraproducente cuando no difieren un contenido de otro. Sin embargo, son ellos mismos quienes recuren a los psicólogos en busca de ayuda cuando identifican los síntomas de estrés o ansiedad, lo cual es bueno, ya que esto solo es posible mediante la decisión y voluntad de cada persona.

La docente y especialista en psicología insta a que siempre, no solo en tiempos de coronavirus, se debe mantener una vida sana y saludable, evitar las tensiones y el miedo exacerbado que obligan a las personas al encierro total y rutinario. Por el contrario, invita a fortalecer el sistema inmunológico mediante acciones positivas que aportan a la calidad de vida en medio de cualquier dificultad que limita la felicidad de vivir.