
Especialistas en medioambiente y estudiantes debaten sobre cambio climático

Con el propósito de crear un espacio de intercambio de conocimientos y experiencias acerca de la mitigación de daños ambientales, el Departamento de Química Ambiental de la UNAN-Managua junto con el MARENA y el Movimiento Ambientalista Guardabarranco organizó el foro estudiantil «Nicaragua frente al cambio Climático».

En la actividad, efectuada en el Auditorio Héroes de la Paz, el licenciado Miguel Dávila, especialistas en cambio climático del MARENA y el maestro Enrique Madrigal, coordinador del Movimiento Ambientalista Guardabarranco, expusieron los temas: Nicaragua y el cambio climático y Medioambiente y voluntariado juvenil en Nicaragua.

Durante su intervención, Dávila presentó las estrategias que Nicaragua implementa en el tema, entre ellas, una iniciativa ambiental y productiva en los lugares más vulnerables. «El corredor seco de nuestro país es una prioridad dentro de estos programas, 25 municipios serán beneficiados con una estrategia de adaptación al cambio climático», refirió el ponente.
Por otra parte, informó que en la Costa Caribe se están ejecutando proyectos para el manejo forestal sostenible y el establecimiento de sistemas productivos, los que favorecen el plusvalor en los sectores productivos de las comunidades aledañas a las Reservas de Biosfera.

Por su parte, Madrigal se refirió a los aportes que los estudiantes de carreras afines al medioambiente pueden brindar a las políticas de cambio climático del país, así como su incorporación al voluntariado. De igual forma, presentó objetivos, lineamientos y las principales acciones que el Movimiento realiza para preservar el medioambiente.
Mencionó entre otras labores que acompaña el Movimiento, la protección y liberación de tortugas en los refugios de vida silvestre, las jornadas nacionales de reforestación, adopción de árboles, capacitaciones, giras educativas y un programa de seguridad alimentaria dirigido a jóvenes acuicultores.
Para los especialistas, es importante que la comunidad universitaria reflexione y se involucre en estas actividades ya que son los futuros investigadores y profesionales que asumirán los retos de transformar las malas prácticas que han generado el calentamiento global.