
Reflexiones históricas y políticas con ocasión del Día del Maestro en Nicaragua 2021

Fredy Franco, Profesor Titular UNAN Managua y Secretario General FEPDES-ATD
En nombre de la Federación de Profesionales Docentes de la Educación Superior de Nicaragua (FEPDES-ATD), saludos y felicitamos a los Maestros nicaragüenses en su Día, a los Maestros Universitarios de Nicaragua y en especial a los Maestros Universitarios de la UNAN- Managua.
Celebramos el Día del Maestro en reconocimiento y homenaje al Maestro Emmanuel Jeremías Mongalo y Rubio.
Fue un maestro destacado por su don de Profesor, por su aporte intelectual en la elaboración de libros de historia y geografía de Nicaragua para los estudiantes y sobre todo, por su valiente acción patriótica en el Mesón de Rivas, enfrentando a los interventores filibusteros estadounidense encabezados por William Walker, el 29 de junio de 1855, hace exactamente 166 años.
En ese contexto, se enfrentaban como parte de las frecuentes guerras civiles que vivimos después de la independencia (el llamado periodo de la anarquía), los grupos políticos legitimistas o conservadores y democráticos o liberales; éste último bando, para tratar de imponerse sobre el otro en el conflicto, contrató un grupo de mercenarios (filibusteros), que llegaron a mediados del año 1855 a Nicaragua, desembarcando por el Puerto El Realejo; e inmediatamente se trasladan a combatir los bastiones Legitimistas, uno de ellos, la Ciudad de Rivas, donde se resiste a los interventores, en la conocida Primera Batalla de Rivas; que ubicados en el Centro de la Ciudad, contiguo al Mesón de Rivas. Emmanuel y otro compañero más prendieron fuego al Mesón y los filibusteros que se encontraban en “La Casona” al llegarles el fuego, salieron en desbandada, lo que unido al ataque de los defensores de la Ciudad, provocó la derrota a los filibusteros que se replegaron hacia San Juan del Sur.
Al final los interventores controlaron el país, dominando y subordinado a los dos bandos políticos en pugna. Walker se autoproclamó Presidente de Nicaragua, restableció la esclavitud y pretendía desde el control de Nicaragua anexar el resto de Centroamérica a los Estados esclavistas del sur de Estados Unidos de dónde provenía Walker y sus mercenarios, practica anexionista que ya habían practicado contra México, robándole la mitad de su territorio.
Convencidos del error político, los bandos políticos se unen a través del Pacto Providencial del 12 de septiembre de 1856 para enfrentar junto a los agresores. Que permite rápidamente, en siete meses, expulsarlos del país, comenzando con la estratégica derrota de la Batalla de San Jacinto del 14 de septiembre de 1856.
Y ayer como hoy nos enfrentamos a los mismos filibusteros, que pretenden someternos como pueblo y como nación. Pero también como ayer y como hoy hay un pueblo que defiende sus derechos soberanos, hay miles de maestros que siguen el ejemplo de Mongalo y Rubio, en defensa de nuestros derechos a construir nuestro propio destino de manera libre, sin agresiones extranjeras.
Lo nuevo es que hemos crecido como nación. Se ha consolidado la conciencia patriótica que viene de aquellas batallas y consolidadas con el aporte patriótico de Benjamín Zeledón, del Ejercito Defensor de la Soberanía Nacional, encabezado por Sandino y luego forjado en la lucha encabezada por el FSLN, que permitió derrotar al instrumento político de los agresores yanquis en Nicaragua, la Dictadura Militar Somocista
La Revolución Popular Sandinista fortaleció los derechos soberanos de Nicaragua y los derechos plenos del pueblo, incluido el derecho a la educación, abrir las puertas de la Universidad a los hijos del pueblo; los derechos de los Maestros a la dignificación de su profesión y a sus aportes al desarrollo humano y nacional.
Vino de nuevo la guerra en los años 80 provocada y pedida por los mismos de siempre. y la enfrentamos heroica y victoriosamente en todos los campos: en lo político, lo económico, lo militar, en lo ideológico y en el derecho internacional.
El 27 de junio de 1986 la Corte Internacional de Justicia de La Haya, emitió una Sentencia Histórica, donde establecía que el culpable de la guerra y la destrucción en Nicaragua era el gobierno de Estados Unidos y que debía indemnizar a Nicaragua por 17 mil millones de dólares. En su prepotencia y desprecio al derecho internacional, Estados Unidos no reconoció la Sentencia, y aunque cuando muchas veces había recurrido a dicha Corte y había ganado muchos casos, exigía el cumplimiento de las Sentencias. Pero ahora, estados Unidos, como fue derrotado en el ámbito del derecho Internacional, no reconoció la Sentencia del máximo tribunal de Justicia del Mundo. Aunque siempre tenía validez y tiene validez, y aun cuando la Presidenta Violeta Barrios de Chamorro, en una conducta vendepatria e inconstitucional, le haya perdonado el pago de indemnización a Estados Unidos de esos 17 mil millones de dólares, que seguramente hoy es una cantidad tres veces mayor, en algún momento el pueblo, el estado nicaragüense hará realidad el derecho que le asiste a Nicaragua.
Los gobiernos neoliberales hicieron retroceder el país en términos soberanos y en termino de los derechos sociales del pueblo. Casi todo fue privatizado, incluida la salud y la educación. Dimos la batalla heroica para que no privatizaran la educación superior pública y mantuvimos de pie la defensa del 6% constitucional.
Con la perseverancia en la lucha por los derechos del pueblo y de la nación, de nuevo el sandinismo tomó el poder en el año 2007 con el liderazgo del Comandante Presidente Daniel Ortega, y desde aquel momento hasta hoy el país ha progresado en todos los órdenes, incluido el fortalecimiento de la educación nacional y de la educación superior publica en particular, con el cumplimiento pleno del 6%, el trabajo conjunto con el Gobiernos, con todas las instituciones públicas y demás sectores económico-sociales del país en cumplimiento del Plan Nacional de Desarrollo Humano. Se ha ampliado y fortalecido la educación nacional; con el aporte de las universidades se ha superado de manera fundamental el empirismo en el magisterio nacional. Y al mismo tiempo, en condiciones de estabilidad y paz, se ha logrado que la mayoría de nuestros docentes universitarios tenga formación postgraduada.
En todos estos años (2007-2021), se ha avanzado en los derechos de los maestros del país y en los derechos de los docentes universitarios a su estabilidad laboral, su salario, su convención colectiva, en su superación y en su participación en la vida universitaria.
Pretendieron detener esos avances en el año 2018 con el intento de golpe de estado, combinado una estrategia terrorista y de guerra psicológica, usando las universidades públicas como parte de ese plan diabólico.
El pueblo unido y bajo la conducción certera del Presidente de la Republica, derrotamos ese fascista intento golpista, que provocó mucho daño humano, económico e infraestructura, pero como el pueblo valiente y digno de Nicaragua acuño su consigna de: no pudieron ni podrán!
El país y las universidades hemos comenzado a recuperarnos de ese momento triste y doloroso provocado por los mismos que hace 166 años quisieron apoderarse de Nicaragua.
Nuestro pueblo, las Universidades han reconstruido lo destruido, y unidos hemos enfrentado otras adversidades, como la Pandemia Mundial del Covid-19, que como país hemos sido ejemplo mundial del control rápido y cuido a nuestra salud. Y las universidades con creatividad y compromiso hemos asegurado el derecho a la educación superior y desarrollado las demás actividades académicas, usando de manera apropiada las tecnologías de la información y la comunicación para el impulso de la educación virtual y otras actividades universitarias.
Y hemos contribuido junto al gobierno a trabajar para superar la Pandemia. Para cuidar al pueblo, su derecho a la vida, frente a dos huracanes extremos, el Eta y el Iota. La correcta estrategia del Gobierno, permitió asegurar el máximo cuido humano. En ese propósito los universitarios contribuimos de manera solidaria, al cuido y reconstrucción de las comunidades afectadas por dichos fenómenos naturales, movilizando a casi 2 mil universitarios compuesta por docentes, estudiantes, autoridades y trabajadores administrativos, para apoyar y reconstruir la vida humana y de las comunidades intensamente afectadas.
En este día recordamos los retos que tenemos como Maestros y como instituciones educativas: seguir fortaleciendo la educación patriótica y humanista en las Universidades; a seguir construyendo una universidad de calidad, cada vez más pertinente y equitativa, que equilibre de manera justa la oferta y matrícula universitaria en la ciudad y en campo, con los Programas de Universidad en el Campo; seguir fortaleciendo y ampliando la formación postgraduada como premisa para hacer investigación-ciencia e innovación, transitando como prioridad de la Maestría hacia el doctorado; a seguir fortaleciendo el uso de las TICs en la vida académica, en los servicios universitarios y sobre todo en la formación profesional. En la creación de una cultura de aprendizaje permanente, para toda la vida, en los docentes universitarios para estar a tono con las exigencias del desarrollo científico, tecnológico, pedagógico, psicológico y didáctico, para impactar permanentemente en la calidad de nuestra labor y de nuestra realización como seres humanos y ciudadanos.
Llegamos al 2021 de manera victoriosa, enfrentando a los vende patrias y agresores como lo enfrentó el Maestro Emmanuel Mongalo hace 166 años.
Los Maestros de Nicaragua, los docentes universitarios de Nicaragua, seguiremos defendiendo el modelo de desarrollo humano y soberano que asegura la Revolución Popular sandinista. Y eso implica defender la soberanía y nuestro estado de derecho, defender la paz y el progreso permanente, que eso solo es posible reafirmando el rumbo revolucionario este 7 de noviembre en apoyo al Gobierno del pueblo, al Gobierno de los Universitarios, el que representa el FSLN y el liderazgo del Comandante Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo.
Ese es nuestro compromiso patriótico, social y educativo en homenaje al Maestro Enmanuel Mongalo y a todos los maestros que han luchado por los derechos de nuestro pueblo y de nuestros Maestros, como Ricardo Morales Avilés, Miguel Bonilla, Iván Montenegro y muchos más.
Vivan los maestros Nicaragüenses!
Vivan los Maestros Universitarios de Nicaragua!
Vivan los Maestros de la UNAN Managua!
Viva la Patria!
Viva la Paz!