Voluntariado universitario, aportando al desarrollo humano sostenible

El cinco de diciembre de cada año, se celebra el Día Internacional de los Voluntarios por decreto de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en 1985, en homenaje y reconocimiento a las personas que se suman a la realización de actividades en diversos campos sociales con responsabilidad, respeto y solidaridad, contribuyendo al desarrollo económico y social. El lema de este año es «Si todos hiciéramos trabajos de voluntariado, el mundo sería un lugar mejor», con el que se busca concienciar sobre la importancia del voluntariado en la solución de problemas sociales, económicos y medioambientales. 

La UNAN-Managua ha avanzado significativamente con relación al tema de voluntariado acompañando iniciativas y desarrollando acciones en las áreas social, de salud y medioambiente, conforme las que la comunidad universitaria se implica en distintas jornadas, particularmente los becados internos que realizan cien horas de servicio anualmente, poniendo de manifiesto los principios y valores humanistas que fortalecen en esta casa de estudios.

Entre las actividades del voluntariado en salud, destacan las ferias y jornadas de atención dirigidas a las familias, a quienes se les brinda de manera oportuna servicios de medicina general, odontología, optometría y fisioterapia, junto con la entrega de medicamentos y atenciones especializadas en el caso de que lo requieran.

Reynaldo Josué Madrigal Castillo, dirigente estudiantil de la UNEN  Facultad de Ciencias Médicas, sostiene que el trabajo articulado ha propiciado en 2023 la atención de 1850 personas en la comunidad Titicanú en la Isla Rama Cay, Bluefields, Caribe Sur. «Anualmente, las brigadas, en articulación con estudiantes de la Facultad de Educación e Idiomas, realizamos dos visitas a diferentes comunidades para brindar atención, diagnosticar patologías, dar tratamiento, seguimiento y control», afirma.

Otras acciones de voluntariado son las visitas y desarrollo de actividades lúdicas con niños en situación de riesgo o con discapacidad, a personas con VIH, entrega de paquetes alimentarios, sillas de ruedas, esto como parte del fomento de la inclusión, la empatía y la solidaridad, valores que impulsa la institución y el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN). También, se realizan jornadas de reforestación y limpieza en distintas localidades del país, sumado al acompañamiento de los procesos formativos en la educación primaria y secundaria para el reforzamiento de aprendizajes.  

La implicación del personal y estudiantado en estas actividades pone de manifiesto su compromiso en contribuir a la solución de necesidades de los territorios, consolidando así su responsabilidad como agentes de cambio social al servicio de la comunidad.

Edner Josué Fernández Rivas, dirigente estudiantil de la Facultad de Ciencias Económicas, valora que el voluntariado permite aportar con dedicación y entrega a la solución de grandes desafíos. «Para nosotros los estudiantes es una oportunidad para aplicar conocimientos, desarrollar habilidades asociadas al liderazgo, el trabajo en equipo y la comprensión más profunda de la realidad», afirma. 

Asimismo, señala que este accionar institucional basado en el respeto a los derechos humanos, la inclusividad y la solidaridad es coherente y articulado con los planes del Gobierno encaminados al progreso socioeconómico. «Siendo parte del voluntariado hemos aprendido lengua de señas, realizamos visitas constantes a instancias donde los niños necesitan ayuda económica y emocional debido a su situación», recalcó Fernández.

De acuerdo con Rosa Amelia Zambrana, dirigente estudiantil de Educación e Idiomas, ser parte de esta experiencia es de satisfacción porque propicia trabajar directamente con niños y adolescentes de los colegios donde brindan reforzamiento en las asignaturas de Matemática y Lengua y Literatura. «Los padres de familia, los profesores y directores han mostrado su alegría y agradecimiento al ver mejores resultados de aprendizaje; es una experiencia enriquecedora que contribuye al bienestar de la comunidad en su conjunto».

La máster Alejandra Solórzano, ejecutiva del Vicerrectorado de Asuntos Estudiantiles, sostiene que en las tres líneas básicas del voluntariado que coordina esta instancia se llevan a cabo tareas articuladamente con instancias del Gobierno sandinista, conforme los lineamientos del PNLCP-DH 2022-2026. De igual manera, recalca que se ejecutan otras acciones mediante convenio suscrito con UNICEF, organismo que auspicia proyectos en beneficio de la niñez y la adolescencia. «Con este proyecto hemos brindado reforzamiento escolar, organizado ferias nutricionales y aportado a la prevención de la violencia de todo tipo» refiere. 

El voluntariado universitario es muy amplio porque integra a toda la comunidad universitaria y es de doble beneficio, indica Solórzano, además, añade: «Todos estamos llamados a ser voluntarios; se beneficia el joven, el anciano y el niño de las distintas comunidades, a su vez, el joven descubre otras realidades, ve las necesidades y cambia su forma de ver la vida».