UNAN-Managua, institución comprometida con la protección de la madre tierra

El Día Internacional de la Madre Tierra se celebra desde el año 2009, fecha en la que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) designó el 22 de abril para recordar que el planeta y sus ecosistemas nos dan la vida y así concienciar acerca del equilibrio que debe existir entre las necesidades económicas, sociales y las ambientales para las generaciones presentes y futuras.

Cada año, se elige un tema para celebrar el Día Internacional de la Madre Tierra. El lema para el 2024 es «Planeta vs plásticos», puesto que se considera urgente la necesidad de reducir la cantidad de plásticos por el bien de la humanidad y del planeta. También se aprovecha para promover la restauración de los ecosistemas, sustento de todas las formas de vida de la Tierra.

La tierra es el único planeta conocido que tiene vida, formado hace unos 4,500 millones de años; sus propiedades físicas, su historia geológica y su órbita han facilitado la existencia de vida durante mucho tiempo. El movimiento de las placas tectónicas provoca que la superficie de la tierra esté en constante cambio, la formación de montañas, los sismos, la regulación de la temperatura y el surgimiento de los volcanes.

Nicaragua en la tierra

Nicaragua es una pequeña parte de este planeta; sin embargo, el impacto del cambio climático, la contaminación y otros fenómenos antrópicos es preocupante. Su extensión territorial ronda los 130,700 km2, de los cuales 121,428 km2 están formados por tierra firme y 10,384 km2 están ocupados por cuerpos de agua. Se ubica en el istmo centroamericano en medio de los océanos Pacífico y Atlántico, ubicación que favorece la subsistencia de miles de especies de flora y fauna.

La población total de Nicaragua en el año 2000 era de 5,123,222 habitantes y para el año 2024 se espera que supere los siete millones; en 1990 la densidad era de 32 habitantes por kilómetro cuadrado; actualmente, ronda los 53 habitantes por Km2, lo cual supone un aumento de 21 habitantes por kilómetro cuadrado en los últimos 34 años.

Según datos del Banco Central de Nicaragua, el país sostiene su economía en actividades y productos que dependen directamente de la tierra; entre ellos: café, caña de azúcar, granos básicos, ganado, aves, huevos y tabaco. En cuanto a la minería, es uno de los mayores exportadores de oro de la región, también produce cobre, cromo, níquel, hierro, plata y molibdeno.

Nicaragua cuenta con casi ochenta áreas protegidas, las que ocupan más de siete millones de hectáreas, equivalente al 57% del territorio nacional. Las primeras áreas protegidas que se establecieron en la década de los 80 son el Parque Nacional Archipiélago de Zapatera en el Lago de Nicaragua y la Reserva de Vida Silvestre Chacocente. En años recientes, han adquirido mayor importancia la Reserva de Biosfera Bosawás, en el departamento de Jinotega, la Reserva de Biosfera de Río San Juan y la Reserva de Biosfera de la Isla de Ometepe.

La tierra ha dado señales a lo largo de la historia; terremotos de grandes magnitudes han afectado distintas zonas del Pacífico de nuestro país: 1610 en León Viejo; 1663 en León y Granada; 1739 en Diriomo y Diriá; 1844 en Rivas; 1855 y 1898 en León, Chinandega y Managua; 1919 en todo el Pacífico; 1922 en Granada; 1926 en todo el país; 1931, 1972 y 2013 en Managua. Los huracanes también han dejado su huella, con pérdidas humanas y materiales significativas; el Mitch, Félix, Joana, Eta e Iota y Julia han sido los que más daños causaron en los últimos años. Los incendios forestales, inundaciones, deslizamientos y las epidemias también muestran cómo está la relación del ser humano con la madre tierra.

Con apoyo del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, el progreso de Nicaragua en la preservación del medioambiente ha sido significativo; uno de ellos es el Plan Nacional de Lucha contra la Pobreza y para el Desarrollo Humano (PNLCP-DH), el cual incluye lineamientos que involucran actividades orientadas al cuido de la Madre Tierra: Más y mejor producción en el campo, desarrollando la agroindustria y el consumo saludable; Ciudades Inclusivas, Seguras y Resilientes, y Medidas para Enfrentar la Variabilidad y el Cambio Climático.

La aprobación de leyes y decretos que ayuden al resguardo de nuestros recursos también abonó a mejorar la simbiosis con nuestra tierra; la Ley General del Ambiente y los Recursos Naturales (Ley No. 217); la Ley Especial de delitos contra el Medio Ambiente y los Recursos Naturales (Ley No. 559); Ley que prohíbe el Tráfico de Desechos Peligrosos y Sustancias Tóxicas; Ley Especial sobre Exploración y Explotación de Minas; Ley de Conservación, Fomento y Desarrollo Sostenible del Sector Forestal; Ley de Pesca y Acuicultura; Ley General de Aguas Nacionales; Ley para la Protección y el Bienestar de los Animales Domésticos y Animales Silvestres Domesticados; Ley Básica para la Regulación y Control de Plaguicidas, Sustancias Tóxicas.

La UNAN-Managua en el Estudio y Aprovechamiento Responsable de Recursos Naturales

La UNAN-Managua imparte carreras orientadas al estudio de la tierra, su cuido y al aprovechamiento adecuado de los recursos naturales; entre ellas, están las ingenierías en Geofísica, Geología, Energías Renovables, Civil con mención en obras Rurales, Agronómica, Agroindustrial, Desarrollo Rural Sostenible; licenciatura en Biología y Técnico Superior en Saneamiento Ambiental. De igual manera, las distintas carreras de grado que ofrece la UNAN-Managua incluyen componentes esenciales sobre desempeños ciudadanos, los que se fundamentan en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Agenda 2030 y el Plan Nacional de Lucha Contra la Pobreza y para el Desarrollo Humano 2022-2026.

Además, cuenta con programas especiales como Universidad Saludable, Verde que te quiero Verde y proyectos de innovación. Mención especial amerita la participación en el concurso Universidades Verdes impulsado por el Consejo Nacional de Universidades; las jornadas de reforestación promovidas por el movimiento estudiantil; charlas, videos y seminarios científicos sobre el cambio climático y gestión de riesgos. Desde los centros de investigación y laboratorios se realizan estudios que aportan al análisis y cuido del agua, conservación del suelo, aprovechamiento de yacimientos minerales, biorremediación de sitios contaminados y a la gestión adecuada de los recursos. Esto evidencia el compromiso de la UNAN-Managua para proteger y preservar la madre tierra, lo cual requiere de la participación de toda la comunidad universitaria.