El modelo curricular por competencias aflora logros en el trabajo integral en los profesores y muy especialmente en los estudiantes. Una muestra como evidencia

La UNAN-Managua inició el proceso de transformación curricular en el 2019 principalmente tratando de dar respuesta al reto de la maestra Ramona Rodríguez Pérez, rectora de esta alma mater y presidenta del CNU, de armonizar las carreras de ciencias de la educación que se imparten en las universidades públicas. Las carreras de ciencias de la salud y de ciencias económicas finalizaron su proceso en el año 2020.

La Dirección de Docencia de Grado ha venido cumpliendo con su misión que expresa: «Fortalecer la calidad de la docencia universitaria, mediante un proceso ordenado y sistemático de acompañamiento pedagógico en los colectivos docentes de los Departamentos y Facultades de la UNAN-Managua, que incluya además la formación en innovación pedagógica, metodología de la revisión, asesoría, evaluación y en sistematización de la práctica de mejora continua. Es insoslayable la aplicación de los principios y valores institucionales antes, durante y después del proceso de Formación Profesional».

Bajo este precepto los ejecutivos que forman parte de esta Dirección han cumplido en tiempo y forma con esos estándares del perfeccionamiento, del acompañamiento, de la formación pedagógica y muestra de ello son los resultados reflejados en la muestra que se presenta a continuación. El informe de ambas Facultades evidencia el trabajo de integración alcanzado y de las formas de evaluación que ha venido cambiando como un paso transicional de la evaluación de objetos a evaluación de competencias, del trabajo aislado y personal que realizaba el profesor (educación tradicional) al trabajo en equipos de áreas y con funciones específicas dictadas bajo el enfoque curricular (trabajo integrado por competencias).

En este pequeño pero bien fundamentado trabajo es evidente también el producto obtenido por los ejecutivos de Docencia de Grado quienes han asumido muy responsablemente, con compromiso social e institucional, con ganas de promover el cambio a partir de su propio ejemplo, con disciplina, con audacia de aprender haciendo y con el cuidado de diseñar cada una de las fases, etapas, documentos guías, procedimientos y talleres. Lo estamos logrando, ya se observan avances significativos, los que hay que seguir promoviendo, apoyando, motivando en su ritmo y su calidad.