
Juana Arbizú: «La formación holística nos permite brindar acompañamiento comunitario integral»

El poder convivir con la comunidad, que las personas nos cuenten sus perspectivas de vida, que abran su corazón, eso es lo que más me ha encantado del proceso formativo»
El anhelo de formarse profesionalmente motiva cada día a Juana María Arbizú Hernández a trasladarse desde el reparto San Ignacio, municipio de Granada, hacia la UNAN-Managua, institución en la que estudia la carrera de Trabajo Social, la cual decidió cursar con la idea de adquirir herramientas y competencias que le permitan atender y acompañar a las familias en distintos contextos.
«El poder convivir con la comunidad, que las personas nos cuenten sus perspectivas de vida, que abran su corazón a nosotros, que nos den esa confianza, eso es lo que más me ha encantado del proceso formativo», manifiesta la joven. Además, reconoce que desde el Trabajo Social es posible brindar el apoyo necesario a las familias gracias a la formación holística que comprende la profesión, la cual incluye elementos de las ciencias jurídicas, psicológicas, sociológicas, de acompañamiento y de gestión social.
Uno de los mayores triunfos para Arbizú es haber ingresado a la Universidad; agradece a nuestro Buen Gobierno Sandinista porque, además de ser protagonista de la educación gratuita, integral y de calidad, recibe Beca Académica, aporte que le facilita diariamente movilizarse para recibir sus clases. «Es una gran oportunidad de superación y he sido constante estos cuatro años; para mí los estudios representan un gran paso para el futuro».
Entre las experiencias significativas que ha logrado en la carrera menciona el acompañamiento brindado a las familias por medio del trabajo de campo, dinámica que se les facilita en coherencia con el Modelo Curricular por Competencias que impulsa la Universidad para el desarrollo de habilidades y capacidades científicas y humanísticas que los estudiantes implementan en beneficio del pueblo.
Arbizú valora este modelo como excelente, puesto que permite aplicar los saberes en situaciones reales, generando propuestas integrales, al respecto, reconoce la importancia de las clases electivas, puesto que facilitan conexiones en diferentes áreas no solo de la carrera, sino con otras disciplinas. La joven también manifiesta que las estrategias integradoras son acertadas, ya que desde el primer año impulsan la inserción de los estudiantes con las realidades sociales.
«La estrategia integradora comienza con la vinculación territorial del trabajador social, continúa con la realización de un mapeo, contextualización y aplicación de un diagnóstico social comunitario, etapas que permiten el diseño de planes de acompañamiento, sistematización y formulación de proyectos sociales», resalta Juana. También expresa que el profesional de esta carrera aporta a nuestro Modelo Revolucionario de Nación desde el compromiso y accionar comunitario.
«Nuestra labor siempre va de la mano con todo lo que dirige nuestro Gobierno; buscamos esa innovación sin desvincularnos de las nuevas políticas de restitución de derechos, de cómo llegar a las comunidades y trabajar en la búsqueda de nuevas estrategias y metodologías para que la gente se involucre y sea protagonista de las nuevas victorias». Las perspectivas de Juana María Arbizú son seguir trabajando por el empoderamiento comunitario de la familia, buscando cambios y transformaciones positivas que aporten al desarrollo del país.