Me siento contento y orgulloso de saber que podré estudiar en una gran nación, gracias a la Universidad, al respaldo familiar y a la buena voluntad de nuestro buen Gobierno.
Jordano Barrios, originario de la comunidad Sintiope, municipio de Altagracia, Isla de Ometepe, es uno de los estudiantes seleccionados para cursar estudios superiores en la República Popular China, beneficio que, al igual que otros jóvenes del país, recibirá como resultado de acuerdos suscritos con instituciones de este hermano país en el marco de los lazos de amistad y cooperación.
En 2021, Barrios se trasladó hacia Managua con una meta planteada: estudiar en la UNAN-Managua, la universidad más grande de Nicaragua, en la que está cumpliendo el sueño de convertirse en un profesional al servicio del pueblo. Jordano asegura que fue la mejor decisión que tomó, puesto que, además de contar con una educación gratuita y de calidad, también se le han presentado otras oportunidades para continuar preparándose académicamente para generar aportes a la sociedad, particularmente, a la comunidad de la que procede.
El joven, quien actualmente cursa el cuarto año de la licenciatura de Inglés, se considera una persona perseverante y comprometida con la excelencia académica. Comenta que desde la niñez se sintió motivado por los idiomas, influenciado también por su entorno, debido a que creció en una zona turísticamente activa. «En esta decisión también tuvieron que ver mis profesores de secundaria, quienes despertaron en mí el deseo de ejercer la docencia y compartir conocimientos».
Entre los motivos por los que decidió estudiar en esta casa de estudios del pueblo y para el pueblo, el joven menciona los beneficios como la calidad y gratuidad garantizada mediante el Programa de Becas, iniciativa surgida con la Revolución. «Como becado interno gozo de alojamiento, alimentación, seguridad, condiciones y recursos para mis estudios», manifiesta Barrios, además, reconoce que los docentes están altamente capacitados para mediar los aprendizajes adecuadamente.
El futuro profesional valora que las oportunidades para los estudiantes trascienden los espacios de los recintos universitarios, puesto que la Universidad cuenta con alianzas estratégicas que permiten el intercambio y enriquecimiento científico y cultural. Al respecto, refiere que las buenas relaciones de colaboración entre Nicaragua y la República de China le permitieron optar como estudiante de la UNAN-Managua a una beca para realizar estudios en este país.
«Fui beneficiado para estudiar Enseñanza del Chino Mandarín como Segunda Lengua; me siento contento y orgulloso de saber que podré estudiar en una gran nación, gracias a mi alma mater, al respaldo incondicional de mi madre y mi abuela que han luchado incansablemente para sacarme adelante y a la buena voluntad de nuestro buen Gobierno, que vela por el bienestar y el desarrollo sostenible de su pueblo», comenta.
Con esta estancia académica espera seguir creciendo personal, académica y culturalmente. «Estoy preparado para afrontar cualquier reto, con la ayuda de Dios», asegura Jordano, quien además indica que su aceptación ha sido una noticia especial para él y su familia. Este beneficio lo compromete a esforzarse más y a dar lo mejor para poner en alto el nombre de la UNAN-Managua y de Nicaragua.
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