Aplicación práctica de la IA: El proyecto creativo de estudiantes de Telemática del CUR–Carazo

Estudiantes de la carrera de Telemática de la UNAN-Managua/CUR-Carazo General Miguel Ángel Ortez, desarrollaron un proyecto de innovación tecnológica centrado en el uso de visión computacional e inteligencia artificial, demostrando el potencial de estas herramientas para resolver necesidades reales dentro del entorno universitario.

El trabajo, elaborado por Elyin Alexander Navarro López y Christian Humberto Rodríguez Matute como parte de su proyecto de graduación, consistió en la implementación de un sistema de detección de objetos en tiempo real mediante el uso del modelo YOLO, integrado a las cámaras de vigilancia recientemente instaladas en la institución para fortalecer la seguridad y los servicios ofrecidos a la comunidad académica.

La idea del proyecto surgió a partir del interés de los estudiantes por aplicar de manera práctica los conocimientos adquiridos durante la carrera, combinándolos con tecnologías emergentes que actualmente marcan tendencia en el ámbito de la ingeniería y la informática. Al observar que la universidad se encontraba instalando cámaras, identificaron la oportunidad de aprovechar estos recursos para desarrollar un sistema inteligente que fortaleciera el funcionamiento institucional. Así, el proyecto se consolidó como una propuesta innovadora que une teoría, práctica y tecnología de vanguardia.

Desde su concepción, el sistema fue pensado con un enfoque práctico, orientado a cumplir dos objetivos principales: demostrar la aplicabilidad de la inteligencia artificial en un entorno real y ofrecer una herramienta que aportara eficiencia, seguridad y modernización al CUR–Carazo. La incorporación de un modelo de detección en tiempo real permite automatizar procesos que tradicionalmente requieren supervisión humana continua, por lo que la iniciativa también responde a la necesidad institucional de optimizar recursos y reducir la carga operativa del personal de vigilancia.

El impacto de este proyecto dentro del centro es significativo debido a que introduce tecnologías de inteligencia artificial y visión computacional en un entorno académico donde estas herramientas pueden servir como base para futuras investigaciones y proyectos innovadores;  de acuerdo con los estudiantes, el sistema permite automatizar tareas de monitoreo y detección de objetos o situaciones relevantes, mejorando la seguridad interna y contribuyendo a un monitoreo más eficiente y preciso en tiempo real. Su implementación demuestra que la inteligencia artificial es accesible desde el ámbito académico y puede convertirse en un componente fundamental para mejorar los procesos institucionales.

El proyecto también aborda un desafío concreto: la necesidad de contar con un sistema de monitoreo más eficiente y menos dependiente de la supervisión manual, las tareas de observación en tiempo real suelen ser lentas, exhaustivas y propensas a errores, especialmente cuando dependen exclusivamente del recurso humano. Con el uso del modelo YOLO y técnicas de visión computacional, la propuesta ofrece una solución automatizada capaz de detectar objetos o situaciones específicas, permitiendo agilizar procesos, reducir errores y fortalecer las capacidades de vigilancia del campus universitario. La necesidad de resolver problemas técnicos, optimizar el sistema y asegurar su funcionamiento adecuado les permitió a los protagonistas ampliar sus habilidades en programación, análisis y toma de decisiones. Asimismo, descubrieron la importancia de comunicar sus ideas con claridad y trabajar de manera coordinada para superar los desafíos que surgían durante el proceso.

Como parte del desarrollo, los estudiantes enfrentaron retos técnicos relacionados con la configuración del modelo YOLO, la optimización del rendimiento del sistema y la integración efectiva de las cámaras. En las primeras etapas, el modelo no funcionaba adecuadamente en tiempo real y surgieron dificultades con la sincronización de las cámaras. Además, al ser un proyecto desarrollado únicamente por dos integrantes, la organización del trabajo y la distribución de responsabilidades representó un desafío adicional. Sin embargo, mediante la investigación constante, la experimentación y la comunicación efectiva lograron resolver cada obstáculo, reforzando sus habilidades de trabajo colaborativo y gestión de proyectos, comentó Eylin Navarro. 

Los estudiantes reconocen que la universidad desempeñó un papel fundamental con la iniciativa al facilitar los recursos, la infraestructura y la orientación de los docentes. El CUR–Carazo promueve un ambiente que valora la creatividad, la investigación aplicada y la innovación académica, motivando a los estudiantes a explorar nuevas herramientas, investigar tendencias tecnológicas y proponer soluciones a problemas reales, expresa Navarro.

A futuro, los protagonistas expresan su deseo de continuar perfeccionando y ampliando su propuesta, entre sus expectativas se encuentran la integración de más cámaras para cubrir diferentes áreas del recinto, la optimización del sistema de detección y la exploración de nuevos casos de uso, como la gestión de inventarios o la implementación de sistemas de seguridad avanzados. Además, buscan documentar los resultados y compartirlos con otros estudiantes, con el fin de inspirar nuevos proyectos y promover el aprendizaje colaborativo, por medio de proyectos de investigación e innovación, para experimentar, aprender y enfrentar desafíos de la formación profesional.