
UNAN-Managua se une al III Ejercicio de Preparación para Proteger la Vida en Situaciones Multiamenazas

Desde sus recintos, Centros Universitarios Regionales (CUR) de Carazo, Chontales, Estelí y Matagalpa y centros investigativos, la UNAN-Managua se unió al III Ejercicio Nacional de Preparación para Proteger la Vida en Situaciones Multiamenazas, organizado por el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER) como parte de las estrategias impulsadas por el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (GRUN), con la finalidad de promover la cultura de prevención y protección de la vida de las familias.
En esta ocasión, la hipótesis se centró en el reporte del huracán Sara de categoría 4 en la Escala Saffir Simpson con vientos de 240 kms/h, localizado a unos 150 km al este de Nicaragua, el cual generó precipitaciones y altas marejadas ciclónicas peligrosas. De igual manera, se registró un sismo de magnitud 7.7 Mw a 82km al este del Bluefields con coordenadas latitud: 12.02N y longitud: 82.92 OE, a una profundidad de 15 km. Como resultado de estos fenómenos hubo daños a las infraestructuras en diferentes partes del país.
Con base en este escenario, la Universidad, por medio del Comité Institucional en Gestión Integral de Riesgos de Desastres (CIGIRD) conformado por las comisiones y brigadas contra incendios, de protección, de salud, de evaluación de daños y primeros auxilios, implementó los planes y mecanismos de activación y comunicación, que muestran la capacidad de organización y respuesta ante cualquier eventualidad. En este proceso fue fundamental el trabajo articulado para realizar la evacuación del personal y la atención en las áreas requeridas en el tiempo mínimo y con calidad humana, gracias a la preparación constante del personal.
Este ejercicio de preparación tiene como propósito fomentar la cultura de protección y fortalecer las capacidades de actuación de las brigadas y equipos técnicos. Además, se ponen a prueba los mecanismos de coordinación y respuestas frente a diversas amenazas. Su organización también responde a la necesidad de estar preparados ante la alta probabilidad de que en el segundo subperiodo lluvioso (agosto-octubre) los acumulados de precipitación se comporten arriba de lo normal en las regiones del pacífico y de la zona noreste y central del país, provocando mayor número de huracanes que incrementan los riesgos de la población expuesta a los fenómenos meteorológicos.