María Alvarado: «El geógrafo es un profesional integral capaz de aportar a disciplinas como las ciencias de la tierra»

Para María de Jesús Alvarado López, estudiante de la carrera de Geografía, poder realizar sus prácticas preprofesionales en el Centro de Investigación de Recursos Acuáticos (CIRA) fue una oportunidad valiosa y pertinente debido a su interés de enfocar su profesión al tema de los recursos hídricos. La joven recibió acompañamiento desde el Laboratorio de Hidrogeología donde conoció el quehacer de esta área en la que le ha agregado experiencias de campo a sus conocimientos y habilidades.

Desde el primer día, manifiesta haberse sentido muy bien recibida por el Centro, en particular del maestro Jorge Guatemala, jefe de laboratorio, quien ha sido uno de sus mentores, además menciona que su estancia en el lugar le ha ayudado a tener una visión más amplia acerca de distintos procesos propios de su carrera de estudio como la recolección y el análisis científico de datos. Para Alvarado, el geógrafo es un profesional integral, capaz de aportar a superar desafíos en distintas disciplinas como las ciencias de la tierra, por lo que valora como pertinente que la Universidad continúe formando geógrafos al servicio del pueblo.  

Su deseo de consolidar sus capacidades en el área investigativa la ha llevado a participar en tres ediciones de la Jornada Universitaria de Desarrollo Científico (JUDC) con estudios realizados en comunidades, en los que ha abordado temas de interés en esta profesión y aunque no obtuvo siempre uno de los primeros lugares, le resultó ser una experiencia maravillosa y rigurosa, que le ayudó a mejorar su habilidad en la oratoria y elaboración de documentos académicos.  

Otra de las plataformas en la que tuvo la oportunidad de presentar uno de sus trabajos investigativos fue en Índice Nicaragua, para ese momento, Alvarado ya contaba con más habilidades para la exposición de sus investigaciones. «Con mis participaciones fui aprendiendo a comunicarme de mejor manera, interactuar con estudiantes y docentes, fue una experiencia más tranquila», comenta. 

Además del CIRA, otro de los espacios donde fue recibida para su crecimiento profesional fue en el Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales (MARENA), donde permaneció durante casi un año y pudo integrarse a las distintas campañas y proyectos a los que aporta esta institución como Verde que te quiero verde. «Mi estancia en el MARENA me ayudó a comprender aún más los procesos de mi carrera, como el manejo de los ciclos y los sistemas de información geográfica».

Actualmente, se encuentra en proceso de desarrollo de su monografía, modalidad con la que culminará una de las etapas más maravillosas y significativas de su vida, como es la formación universitaria, donde paralelamente se le han presentado oportunidades laborales, puesto que ha podido trabajar con consultores y empresas privadas en las que ha interactuado con profesionales que han sabido compartirle conocimientos y la han apoyado en su crecimiento profesional. 

Para el logro de sus objetivos, ha sido fundamental el apoyo de su familia, sus padres no lograron culminar sus estudios, pero apoyan cada meta que se plantea la joven, quien dedica su tiempo libre a practicar danza y a hacer ejercicios. «No me queda más que a agradecerles a ellos por todo su sacrificio; a la Universidad, por la formación de calidad que me ha ofrecido y a mis docentes, porque ha sido gratificante que hayan sido mis guías», reconoce la futura profesional.