Francisco Mayorga Marín, protagonista que aporta a la epidemiología con un enfoque social

El maestro Francisco Mayorga Marín es originario de León, desde hace nueve años se desempeña como docente-investigador del Centro de Investigaciones y Estudios de la Salud (UNAN-Managua/CIES); actualmente es protagonista del Doctorado en Ciencias de la Salud que imparte este centro. Desde la secundaria se sintió atraído por la investigación, ejemplo de ello es que para su monografía realizó un estudio del Río Chiquito, en León,  trabajo con el cual inició en la aplicación del método científico.

«Mi motivación es mi familia; soy padre de tres hijos y siempre he tenido el apoyo de mis padres y mi esposa. En mi familia nadie ha alcanzado el grado de doctor, se han dedicado más a las leyes, muy pocos se han involucrado en la salud y eso me impulsa para que se sientan orgullosos de que el esfuerzo que han hecho para que yo estudie ha tenido frutos. También ha sido clave el apoyo económico de mis padres y el apoyo emocional de mi núcleo familiar para alcanzar metas académicas, porque mi esposa también está estudiando su doctorado. Dedica tiempo leyendo, escribiendo y formando a otros profesionales para tener impacto social en el país».

Cursó la licenciatura en Bioanálisis Clínico, en la que despertó su interés por los microorganismos «siempre me interesó la Biología, pero me pareció fascinante la microbiología. En la carrera me dediqué a muchas ramas del análisis clínico y cada año hacíamos investigaciones documentales a nivel observacional o descriptivo. Además, trabajé en un centro de enfermedades infecciosas en el que adquirí más conocimientos sobre virología, bacteriología, micología y química clínica».

En el año 2012 realizó su internado rotatorio y se gradúo en el año 2013; posteriormente se desempeñó en un laboratorio clínico en la ciudad de León, del que también llegó a ser responsable, aunque más allá del trabajo de laboratorio mantuvo su interés por investigar. Ingresó a la Maestría en Epidemiología de UNAN-Managua/CIES en el año 2014, con la que cambió la visión que tenía de la investigación; «aquí ya no solo mirábamos los problemas de salud sino también el porqué; también me atrajo mucho la bioestadística, un componente clave en epidemiología porque se relacionan variables, causas, consecuencias, datos y otros aspectos científicos, que fueron determinantes para mi tesis en resistencia antimicrobiana».

Al concluir con honores este programa recibió una beca para estudiar la Maestría en Salud Pública, interesado en ir más allá y explorar los determinantes sociales de la salud que inciden en los problemas. Concluyó sus estudios con excelencia académica, pero lo más interesante con una visión diferente: la epidemiología social, «la investigación tenía ahora una perspectiva social vinculada a las enfermedades transmisibles, posteriormente también fue incorporando elementos de enfermedades no transmisibles».

Para ese entonces ya laboraba en UNAN-Managua/CIES, desde donde ha ejecutado investigaciones y participado en procesos académicos en los que se aporta a fortalecer el Modelo de Salud Familiar y Comunitaria (MOSAFC); «desde el año 2015 he trabajado como docente en las maestrías, diplomados y cursos, también he aportado como tutor, asesor metodológico y en proyectos sobre estadística en salud, Tuberculosis, VIH, herramientas estadísticas para investigación cuantitativa, acceso a la salud y malaria». De manera simultánea realizó cursos en cultura de investigación, epidemiología intermedia, estadísticas de salud pública, aplicaciones de regresiones, determinantes sociales de la salud; todos ellos en universidades e institutos internacionales de México, Inglaterra, España, Japón, Brasil, entre otros.

Para estudiar y realizar sus investigaciones, Francisco comenta que ha sacrificado tiempo con su familia; «me trasladé a Managua hace casi diez años; al inicio viajaba diario desde León; pasaba varias semanas sin ver a mi familia, pero era muy cansado viajar diario. Entonces me mudé a la capital, aunque me vine solo y actualmente viajo los fines de semana porque ellos siguen allá. Lo más complicado fue cuando alguno de mis hijos nació con una complicación de salud. Esto nos motivó a dedicarle más tiempo para desarrollar su capacidad y hemos tenido grandes logros con él porque está en el cuadro de honor en la escuela. Esto me ha servido para dar lo mejor de mí para aportar a la salud de las personas».

El Mtro. Mayorga ha sido autor y coautor de numerosas publicaciones científicas, entre libros, artículos científicos y capítulos, disponibles en plataformas nacionales e internacionales; desde el año 2022 suman más de 500 citas y descargas. Entre los temas destacan sistemas de Salud, tiempos de espera en salas de emergencia, resistencia a insecticidas, comportamiento epidemiológico y factores de riesgo del dengue, autocuido en accidentes laborales, factores de riesgo asociados a la morbilidad materna, caracterización de pacientes de eventos cardiovasculares, factores de riesgo asociados a la morbilidad materna, complicaciones posoperatorias, eficacia de vacunas, acceso a servicios de salud en territorios adversos y virtualización en programas de postgrado.

Estos trabajos le han valido reconocimientos nacionales e internacionales; es así que en el año 2023 recibió mención honorífica en el concurso Joven Científico e Investigador de Nicaragua, organizado por el MINJUVE, en 2018 obtuvo el primer lugar en el Congreso Internacional de Nefrología, ejecutado por la Asociación de Nefrología e Hipertensión Arterial de El Salvador, con una propuesta sobre técnicas estadísticas para analizar la sobrevida de pacientes con enfermedad renal crónica tratados con diálisis. Además de la propuesta de modelos matemáticos estadísticos para estudiar la supervivencia de pacientes que han recibido trasplantes renales.

Uno de los proyectos que más impacto ha tenido es el estudio sobre el uso y tenencia de mosquiteros tratados con insecticidas de larga duración en el Caribe Norte, en el que también se evaluaron estrategias de respuesta ante la malaria; lideró procesos investigativos sobre factores condicionantes para la aplicación de vacunas.

El maestro Mayorga considera que Nicaragua va por buen camino en cuanto a la vigilancia epidemiológica y entomológica gracias al MOSAFC, que brinda una visión integral e integrada de los servicios de salud que se fortalece en la red comunitaria. «Como UNAN-Managua/CIES vamos avanzando de la mano con el Ministerio de Salud porque ese enlace y los datos que se obtienen mediante las investigaciones conjuntas permiten tomar decisiones más acertadas. Las capacitaciones y los estudios del antes y el después permiten realizar intervenciones más eficaces.

Actualmente, está desarrollando su tesis doctoral sobre la influencia del entorno familiar, comunitario y de medios de comunicación social en el tabaquismo de adolescentes de Nicaragua; le gustaría fortalecer la investigación en unidades de sistemas de información y en vigilancia en salud, e incorporarse en redes internacionales que aporten a mejorar la investigación en epidemiología con una perspectiva social para identificar y abordar enfermedades no transmisibles que son las primeras causas de muerte en nuestro país y la región.

«La investigación en salud debe ampliarse en distintos sentidos, buscar redes internacionales y nacionales; tener enfoques multi y transdisciplinarios, incorporar a otras ciencias porque los problemas de salud son complejos y dinámicos y para abordarlos se debe contar con distintas disciplinas».